Alguna noche ocurrirá.
Pregunta a los pétalos de la tristeza
Que en silencio se dejan caer
Sin confesar ninguna respuesta.
Alguna vez va a suceder.
Como ocurren los días huecos
Sin nada por hacer
Sin lamento, sin prender fuego.
Subirán
Como tallos esclavos de luz
Como hijos que ignoran su cruz:
Felicidad
Que no comercia culpas.
Será el próximo vientre
O la mañana venidera
O lo ya ganado
A la madrugada distraída
Llevando en las suelas
Como huellas escapando del camino
Una hora que carga infinitos
Que lanza besos dulces
A la humedad de nacer.
Te toca
Como si viviera dentro tuyo
Aun antes de que fueras.
LA GRACIOSA PRIMAVERA
Hace 2 horas
10 comentarios:
Y ojalá ocurra pronto...
Un besito, Javier.
La luz que se eleva en tallos me parece preciosa. Un abrazo.
Es cierto, alguna vez ocurrirá. Ojalá sea pronto.
Abrazo
Se espera, en el tiempo que transcurre hay algo que espera, y un día salta de su espera hacia la ocurrencia y ya nada es igual
un abrazo.
¿Ocurrirá? El poeta expectante fatiga noches y versos. Confía en el destino; lo desafía.
Mientras, Felicidad, la que no comercia (ni trafica) espera.
Mi abrazo, Querido Amigo.
esta frase es fabulosa:
Como hijos que ignoran su cruz:
Felicidad
Que no comercia culpas.
pffff fa bu lo sa !
besos
Hay frases geniales en este poema!
Y que tal vez ocurra, suceda, nos sorprenda pronto, sea lo que sea...
Un besote, don poeta!
:)
¿Estas triste poeta de lsa palabras dulces?
No creo que me ocurra jamás.
Eso pertenece al pasado.
No es una queja.
Es un hecho.
Saludos.
Me gustan algunos firuletes que tiene este poema. Palabras bien elegidas, bien combinadas. Muy bueno.
Un saludo.
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